El proyecto del Tren Maya con el que la próxima administración federal pretende detonar el desarrollo económico del sureste del país traerá contribuciones en el rubro social para la zona, estimó Diego Prieto Hernández, director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
"Puede contribuir a detonar muchas cosas en los planos social, comunitario, educativo, turístico y todo lo que contribuya al desarrollo del país, al mejoramiento de sus comunidades y a la detonación de actividades que fortalezcan el crecimiento de nuestra economía", dijo.
"Son bienvenidas en el marco evidentemente de nuestra normatividad, cuidando la debida compaginación entre el avance de nuestro desarrollo y la recuperación de nuestras tradiciones, memoria e historia", indicó el funcionario.
Aun cuando no le han presentado el proyecto de manera formal, el titular del INAH externó apoyo al próximo gobierno para la edificación de esa vía ferroviaria que abarcará los estados de Yucatán, Chiapas, Quintana Roo, Campeche y Tabasco.
Consultado tras la presentación del Códice Maya de México en el Museo Nacional de Antropología (MNA), Prieto Hernández mencionó que la institución a su cargo ya tuvo un acercamiento con la próxima secretaria de Cultura, Alejandra Frausto, y su equipo de trabajo.
"No lo conocemos de manera formal, apenas estamos empezando la transición y ya tuvimos pláticas con la próxima secretaria de Cultura. Ya tuvo el instituto una presentación formal con ella y su equipo y nos reuniremos allá con los directores de los centros INAH de los cinco estados que van ocuparse de revisar el proyecto y con el grupo encargado de impulsarlo", señaló.
Adelantó que en caso de que se encuentren vestigios arqueológicos de gran envergadura durante la construcción de la vía, el proyecto original tendrá modificaciones.
"Se plantearán modificaciones en el proyecto en la medida en que aparecen bienes arqueológicos y que pueden ser recuperados y estudiados en laboratorio para hacer el salvamiento correspondiente", explicó.
"Si encontráramos alguna ciudad, obvio tendremos que hacer alguna modificación en el trazo, ver la manera de que las estructuras arqueológicas se conserven y en algunos casos menos frecuentes se plantea el destino como sitio arqueológico de los lugares", refirió.
Afirmó que el INAH recurrirá a su tecnología a fin de constatar que durante la construcción de la vía no se dañe algún vestigio arqueológico en la zona en caso de ser hallado.
"Tenemos tecnologías avanzadas que nos van a ayudar a tener muy claro que es lo que pudiéramos encontrar; tenemos el georradar y el radar de penetración que permite con cierto nivel de aproximación detectar si hay estructuras en el suelo. De manera que lo haremos con toda la celeridad del caso, pero siempre con el cuidado, la sistematización y meticulosidad que implica el trabajo arqueológico", aseguró.
Con información de Notimex