Los techos de madera, a diferencia de los de yeso, son discontinuos, no son húmedos, su superficie es rígida, tienen una buena estabilidad y permite fijar lámparas de techo, difusores, etc.
Para colocar un techo de madera debemos de fijar unos rástreles, en estos se ubicarán las planchas de madera que le proporcionarán el estilo adecuado al techo. Es recomendable que dispongan de una plancha hidrófuga de fibra de vidrio, ya que esta la protege de la humedad del techo.
Una gran ventaja de este recubrimiento es, que es rígida, es muy rápida de colocar, además proporciona belleza y elegancia al hogar.
La madera para el techo se vende de manera independiente, con la cual luego se debe de acoplar para conseguir forrar el techo. Mayormente se utiliza planchas cuadradas para la comercialización. Las planchas utilizan clavos y tornillos para lograrse fijar a los rástreles.
Del mismo modo es aconsejable disponer de un pegamento fuerte como la del carpintero para tener una mejor unión entre las planchas.