Por: Dr. Ricardo Damián García Santillan
La Conspiración de la Profesa, uno de los eventos más intrigantes y menos conocidos del movimiento de independencia de México, se desarrolló en un momento crucial de la lucha por la emancipación del dominio español. Es significativo por su complejidad, los personajes involucrados y su impacto en el proceso independentista. A partir de aquí, historia pura…
Contexto Histórico
En los primeros años del siglo XIX, el Virreinato de la Nueva España vivía una gran crisis económica, política y social. La invasión napoleónica en España en 1808 y la abdicación de Fernando VII en favor de José Bonaparte, conocido como “Pepe Botella”, provocaron inestabilidad en las colonias. En la Nueva España, esto empeoró las tensiones entre criollos y peninsulares.
El movimiento de independencia, iniciado en 1810 por Miguel Hidalgo y seguido por José María Morelos, estaba en una fase crítica a principios de 1820. A pesar de los avances, los insurgentes enfrentaban muchos desafíos para consolidar su lucha.
La Conspiración de la Profesa
Este evento ocurrió en 1820, en un contexto de reconfiguración del poder en España y sus colonias. Con la restauración de la Constitución de Cádiz y un régimen liberal en España, los realistas más conservadores en la Nueva España temían perder sus privilegios y control. El oratorio de La Profesa, dirigido por el padre Joaquín Arenas, se convirtió en el centro de las actividades conspirativas. Los conspiradores querían preservar los intereses de la élite conservadora y mantener el dominio español en Nueva España bajo un régimen absolutista o, en su defecto, apoyar un plan de independencia controlado por ellos.
¿Por qué se le conoce como “Conspiración de la Profesa”?
El nombre proviene del lugar donde se llevaban a cabo las reuniones: el Oratorio de San Felipe Neri, conocido como “La Profesa”, en la Ciudad de México. Este lugar era un punto de encuentro para la élite conservadora y los sectores más reaccionarios del clero, proporcionando un entorno discreto para discutir y planear sus movimientos.
Personajes Clave
Agustín de Iturbide: Inicialmente realista y comandante militar, Iturbide se convirtió en figura clave de la conspiración, buscando la independencia para preservar sus intereses y los de la élite criolla.
Juan O’Donojú: Nombrado jefe político superior de Nueva España en 1821, su llegada facilitó la transición de poder.
Padre Joaquín Arenas: Líder del oratorio de La Profesa, usó su influencia para unir a varios sectores de la élite conservadora.
Matías de Monteagudo: Canónigo de la catedral y miembro activo de la conspiración, representaba a la facción más conservadora del clero.
María Ignacia Rodríguez de Velasco (“La Güera Rodríguez”): Influyente mujer de la alta sociedad mexicana que apoyó los movimientos conspirativos y facilitó contactos entre diferentes sectores de la sociedad.
Desarrollo de la Conspiración
Los conspiradores propusieron un plan para la independencia bajo un régimen monárquico moderado. En diciembre de 1820, Iturbide fue nombrado comandante del Ejército del Sur con la misión de combatir a los insurgentes, pero en realidad utilizó esta posición para negociar con Vicente Guerrero y unir fuerzas bajo un plan común: el Plan de Iguala, proclamado el 24 de febrero de 1821. Este plan establecía tres garantías fundamentales: religión, independencia y unión.
Impacto y Aportación al Movimiento de Independencia
La Conspiración de la Profesa y el Plan de Iguala fueron cruciales para la independencia de México. Iturbide logró unir a diversos sectores de la sociedad novohispana, consolidando el movimiento independentista. El Plan de Iguala recibió un amplio apoyo, llevando a la firma del Tratado de Córdoba el 24 de agosto de 1821, formalizando la independencia de México.
La independencia se consumó oficialmente el 27 de septiembre de 1821, con la entrada triunfal del Ejército Trigarante en la Ciudad de México. La Conspiración de la Profesa destaca como un ejemplo de cómo los intereses políticos y personales pueden influir en los movimientos sociales y las grandes transformaciones históricas, mostrando que la lucha por la libertad fue moldeada tanto por ideales revolucionarios como por pragmatismos políticos y económicos.