Arquitectos: Maurice de Sully
Ubicación: París, Francia
Año Proyecto: 1163-13451163-1345
Ubicada en la parte este de la isla de la Cité que, se encuentra rodeada por el río Sena, el obispo Maurice de Sully emprende la construcción de la nueva catedral a partir de 1163 sobre el solar que ocupaba una antigua basílica dedicada a San Etienne.
Se incorporó aquí el novedoso sistema gótico de arbotantes y contrafuertes, el único capaz de descargar los empujes de la elevada nave central.
Al comenzarse los trabajos en la nave principal, se decidió aumentar su altura 2 metros más.
Esto hizo que el sistema de contrarresto de la bóveda principal, por medio de las cubiertas de las naves laterales, resultase insuficiente. Se solucionó mediante arbotantes exteriores, ya utilizados a principios del siglo XII.
La altura de la nave y la relativa delgadez de sus muros (1 metro de media) exigieron la colocación de contrafuertes exteriores para contrarresta el empuje lateral de la bóveda. Gracias a la bóveda de crucería, las cargas se concentran en puntos concretos, los pilares, lo cual permite que el muro se desmaterialice y se llene de grandes superficies vidriadas.
La edificación coincidió con un período de prosperidad y de creciente dominio de la ciudad, por lo cual la obra debía reflejar este poderío. Así, la edificación se realizó sin interrupciones por problemas económicos, aunque sólo se dio por concluida a mediados del siglo XIV, después de muchas modificaciones e intervenciones de diferentes arquitectos y artesanos.
A unos 20 metros del suelo, una galería con 28 estatuas se levanta por encima de los portales. Cada estatua, de 3.5 metros de altura, representa los 28 reyes de Judea que precedieron la llegada de Cristo. De las estatuas originales medievales sólo quedan fragmentos, ya que durante la Revolución fueron destruidas creyendo que representaban reyes franceses.
El 15 de abril pasado ocurrió un incendio en las inmediaciones de Notre Dame, el cual derrivo la aguja y ha destruido dos tercios de las bóvedas y tejados. Aunque se sabe que la causa de las llamas fue un accidente en las obras de restauración de la aguja, el presidente, Emmanuel Macron
, ha confiado en reconstruir el templo en cinco años.