Documentalmente se tienen registros de que los primeros pavimentos de concreto fueron colocados en Escocia alrededor de 1865. Con el paso del tiempo y los avances en la investigación y la tecnología los pavimentos de concreto se han perfeccionado, de tal manera que hoy en día podemos encontrar obras con más de 100 años de vida.
Algunas ventajas de los pavimentos de concreto son:
– La materia prima agotable utilizada en los pavimentos asfálticos es 7 veces mayor que la utilizada en los pavimentos de concreto.
– La mayoría de los materiales utilizados en los pavimentos de concreto son extraídos localmente, lo que disminuye la generación de CO2 por transportación a largas distancias.
– Los espesores de la base, sub base, etc. son menores en los proyectos de pavimentos de concreto en comparación con los asfálticos, lo que implica mayores ahorros en mano de obra, extracción de material, compactación, tiempo de ejecución, etc.
– Los vehículos automotores reducen el consumo de combustible, ya que, los pavimentos de concreto al ser menos flexibles, requieren menor esfuerzo para circular. Existen datos de un ahorro estimado de entre un 5% a un 20% de combustible con pavimentos rígidos.
– Presentan menor absorción y transmisión de temperatura, reduciendo la isla de calor.
– Requieren de menor iluminación artificial.
– Presentan mejor resistencia ante el clima, derrame de combustibles o aceites.
– Presentan un mejor índice de fricción.
– Menor distancia de frenado.
– Mejor agarre en curvas.
– La vida útil de un pavimento de concreto puede ser mayor a 20 años.
– Se generan menores ondulaciones debido a sobrecargas.
– Los costos de mantenimiento a largo plazo son significativamente menores respecto a los pavimentos asfálticos.
Los pavimentos de concreto no solo son económicos, sino que también son más eficientes y aunque anteriormente el costo inicial era alto en comparación con los pavimentos asfálticos, actualmente ya son muy competitivos.
Fuente: AMIC
