Studio Fuksas proyecta el nuevo Centro de Congresos EUR Roma con la clara intención de llegar a ser un referente de la arquitectura contemporánea en la Ciudad Eterna.
 
Studio Fuksas proyecta el nuevo Centro de Congresos EUR Roma con la clara intención de llegar a ser un referente de la arquitectura contemporánea en la Ciudad Eterna.

El nuevo equipamiento se localiza en el área suburbana romana del EUR, creada para la celebración de una Exposición Universal planeada para el año 1942, que nunca se llevó a cabo.

Frente a la sobriedad y la racionalidad clasicista de la arquitectura del EUR, con edificios proyectados por Marcello Piacentini y Guiseppe Pagano, la respuesta de Studio Fuksas para la concreción de un nuevo centro de congresos es una apuesta por la concreción volumétrica, la rotundidad formal y la tecnología.

El programa se descompone en tres piezas, que los proyectistas han denominado como Teca, Nuvola y Lama. La Teca es un gran contenedor de estructura metálica y cerramientos de doble acristalamiento que acoge en su interior a la Nuvola, una forma orgánica libre que recuerda el volumen de una nube. La Lama es un prisma exento que resuelve un complejo hotelero de más de cuatrocientas habitaciones.
 

La Nuvola es el emblema del proyecto, y su imagen más reconocible. Se configura como una nube atrapada en el interior de una gran caja transparente. La claridad y rigidez geométrica de los volúmenes de la Teca y la Lama se insertan fácilmente dentro de la trama del EUR, y contrastan con la libertad formal de la nube, ondulada y etérea, que parece flotar en el gran vacío central del contenedor que la aprisiona.

El contenedor generado alberga numerosas salas de conferencias, con una capacidad para 6.000 personas, áreas de servicio, aparcamiento en sótano, espacios de vestíbulo y áreas de encuentro y espera. Un sistema de rampas mecánicas conecta los distintos niveles y nos introduce en el interior de la nube suspendida.
 
La nube se construye a partir de unas costillas metálicas de formas curvadas y sinuosas, cuyo cerramiento se materializa mediante una piel translúcida en color blanco. Plataformas y distintos niveles permiten recorrer el interior opalino.

El núcleo de la nube lo ocupa un gran auditorio con aforo para 1.800 personas, y toda una serie de elementos de apoyo y servicio para la sala, así como áreas para exposición. El interior del auditorio se recubre de madera y se equipa de butacas en color rojo, diseño de Studio Fuksas. Para la iluminación, los mismos arquitectos han diseñado un modelo de lámpara, conocido como Nuvola, que comercializa iGuzzini.
 

Fuente: www.arquitecturayempresa.es