Atrás quedaron los estereotipos que se asocian a piedras preciosas o acabados dorados. Hoy la atención está en el carácter artesanal y el detalle.

(CIUDAD DE MÉXICO) – En el pasado quedaron los estereotipos que se asocian a piedras preciosas o acabados dorados y que ahora apenas encuentran acomodo en países como Rusia o China.

Así lo estima Fabián Pellegrinet Conte, diseñador argentino y copropietario de la firma Hamilton Conte, para quien la frontera entre el lujo y el mobiliario producido en masa está  en su "carácter artesanal y en la atención que se presta a cada mínimo detalle".

Cada pieza de su colección narra una historia, tal como sucede en el caso de Emma J. Shipley, cuyas ilustraciones de animales y naturaleza se inspiran en sus viajes y luego se imprimen en accesorios como pañuelos o almohadas.

Su primera colección disponible en los almacenes de lujo Liberty’s en Londres se agotó a las pocas semanas de ponerse a la venta, lo que convirtió a Shipley en uno de los nombres más sobresalientes en 2017.

Según Scott Maddux, socio fundador de Maddux Creative, para considerar algo lujoso debe proponer "soluciones originales, que sea bespoke, artesanal o sustentable", agrega.

Maddox apunta que en 2017 habrá más color y texturas únicas, además de una proliferación de estampados, particularmente geométricos y de líneas limpias, y materiales que llamarán la atención, bien por su originalidad o calidad.
 
 
  

 
^{Narrativo. Cojines de seda}

Nelly Gocheva, editora global de T Brand Studio International, agrega otras cualidades, como "la capacidad de sorprender, la durabilidad y atemporalidad de los materiales".

La experta opina que un interior lujoso, ya sea un departamento o una oficina, debe ser cálido y generar una sensación de comodidad para los usuarios. El uso de mobiliario de alta calidad y accesorios y piezas únicas que reflejen la personalidad del propietario del espacio son otros atributos que Gocheva también señala como importantes.

Julia von Werz, arquitecta alemana reconvertida en diseñadora, fabrica sus muebles con madera que proviene de los bosques de Bavaria, cercanos a su oficina de Múnich.
 
 

 
^{A detalle. Silla Arture}

Aboga por que la producción se lleve a cabo localmente y de forma artesanal, factores que añaden, en su opinión, un plus de calidad y sustentabilidad en este segmento.

La tecnología, en tanto, se hará más presente en el diseño, sobre todo en cocinas y baños, una tendencia que comparte con el sector de viviendas residenciales, tal como adelantó la consultora Juniper Research.

"El lujo lidera aspectos como fabricación y producción, ya que es en este segmento donde más se experimenta con tecnologías, materiales e innovaciones que después se trasladan a otros segmentos del diseño e interiorismo", señala Maddux.
 
 

 
^{Sustentable. Mesa Millbrook II}
 
Entre verde y azul
Referente a los colores y tonalidades que dominarán el año, Laurie Pressman, vicepresidenta del Pantone Color Institute, comparte que el gris y el beige serán los colores base de los interiores.

Las tonalidades amarillas extenderán su popularidad, ya que según la experta "su asociación con el sol traerá consigo calidez y buen humor en tiempos donde predomina el frenesí".

Los colores extraídos de la naturaleza también serán tendencia, especialmente los verdes, el azul verdoso o el musgo.
Pressman agrega que en los interiores lujosos primará el minimalismo, y que esa simplificación y orden se verán acentuados gracias al uso de tonalidades de la familia del blanco.

 

 
 
^{Artesanal. Colección Idylle}
 

Aclara que la diferencia entre un interior de lujo y uno que no lo es no depende tanto de la paleta de colores sino "del estilo de vida y el entorno que el usuario quiera crear a su alrededor".

El color 2017 que seleccionó Pantone es el Greenery (15-0343), un verde que tiende al amarillo y que evoca el reverdecer de las hojas luego del invierno.
 
"El Greenery emerge para brindar la esperanza que anhela la colectividad en medio del complejo panorama político y social", cita el comunicado en que la empresa hizo el lanzamiento del color en diciembre.

Behr se inclinó por una gama de tonos pasteles "pero no tan dulces", aclara a Obras Erika Woelfel, vicepresidenta de Color Marketing de la compañía de pinturas.
La nueva colección presenta tonos rosados, mentas, rojo picante y grises azulados, desglosados en tres paletas que apelan al confort, la seguridad y el eclecticismo.
 

^{Original. Gabinete Black Tie Swan}

Para la arquitecta Lielhmane Ruiz, la paleta de 'colores seguros' le sienta bien a los working hubs o lugares de emprendimiento donde los jóvenes generan ideas y buscan inspiración, además rescata la sensación de naturaleza con colores llamativos como el Lemon Burst.

Regina Pozo, curadora y diseñadora, destaca las tonalidades menta que ofrece Behr y "que no se han visto mucho".
Considera que esta paleta de colores aplicada en interiores de edificios como las colonias Roma o Cuauhtémoc queda bien. Para ella, las tres opciones de Behr tanto en entornos clásicos como en contemporáneos son funcionales.

Mientras, la tendencia de color de Comex apuntó al azul helénico para responder a una añoranza de paz y claridad intelectual, de acuerdo con ColorLife Trends 17.
"La combinación equilibrada entre el azul y el verde en este tono ayuda a que nuestras turbulentas mentes se calmen", se lee en su comunicado.

Fuente: http://www.obrasweb.mx